El arte, en especial de vanguardia, a pesar del aparente críptico significado, genera emoción y reacción en el espectador de la obra, que tienen que ver con sus creencias y su modo personal de entender la realidad por intermedio de imágenes.
Hace algunos años una instalación de jugueras con peces en el museo metropolitano en Santiago, más allá de demostrar la intención del autor sobre la precariedad de la vida, demostró nuestro elemental repudio al maltrato animal. La reacción publica ante la instalación nos mostro como éramos, la obra de los peces solo actuó como catalizador.
El escultor Eugenio Merino es de los artistas acostumbrados a generar polémica, con obras como la de Fidel Castro convertido en zombie.
El miércoles 17 de Enero durante la jornada inaugural de la feria ARCO 2010 de Madrid, el autor catalán presento la escultura “Starway to Heaven”, la que genero una polémica reacción.
La obra hiperrealista en resina, silicona y cabello humano, muestra a un musulmán que reza con su cara cerca del suelo, sobre su espalda un sacerdote católico arrodillado orando y sobre los hombros de este ultimo esta parado un judío ortodoxo erguido con la torah en la mano. Una torre humana rezando.
La obra provoco la inmediata, como también incomprensible, reacción de la embajada de Israel en Madrid. A través de un comunicado, el organismo diplomático critico la escultura alegando que esta contiene “Elementos ofensivos para los judíos, israelíes y seguramente para otros”. El documento agrega que “valores como la libertad de expresión o la libertad artística sirven para ocasiones de simple disfraz de prejuicios, de estereotipos o de la mera provocación. Un mensaje ofensivo no deja de ser hiriente por pretender ser una obra artística”.
Por más que miro la fotografía “Starway to Heaven” de Merino, no encuentro lo ofensivo para la religión judía, aun menos para los israelíes. Si la obra genera una determinada reacción en los diplomáticos israelíes, es muestra solo de sus personales aversiones.
La reacción diplomática muestra sus factores sicológicos, la obra actúa solo como catalizador, así como cualquier interpretación del observante proviene de elementos sicológicos subjetivos y personales. La declaración muestra un cierto delirio persecutorio, algo común en los sionistas; esa versión particular etnocentrista de estar aislados luchando contra todos, todos los rechazan, todos intentan ofenderlos, todos los quieren herir, todos les tienen prejuicios.
Este delirio persecutorio, llegando a institucionalizarse pretende sistemáticamente acallar cualquier crítica, incluso cuando no hay crítica aparente, como es el caso de la obra de Merino.
Así queda manifiesto los complejos sionistas, casi bordeando el paroxismo más ridículo. Mas cuando la numerosa comunidad musulmana española no tuvo ninguna reacción, ni los católicos españoles se sintieron ofendidos teniendo presente que es una de las naciones más católicas de Europa.
Pero más revelador es que ninguna entidad religiosa judía haya realizado alguna protesta, considerando que el judío representado es un ortodoxo o tales un hasidic, ambos corrientes judías religiosas y contrarias a los sionistas, no les parece ofensiva la obra.
Nos parece aun más extraño, como occidentales, que un estado que dice ser secular tome una posición defensiva religiosa, pero debo recordarles que para el sionismo el ser judío es ser un pueblo y para ser un israelí hay que ser judío.
Eugenio Merino, el autor, de defiende argumentando:
“Yo me dedico al arte y acepto que piensen lo que quieran. He hecho una pieza que se supone que habla de la unidad de las religiones y de la alianza de civilizaciones.”
“La lectura de la obra es muy clara y positiva: es una torre donde las tres grandes religiones colaboran para llegar a un mismo fin. El mismo Dios” a Europapress.
La religión judía basada en la Torah, prohíbe a todo judío la creación de obras antropomorfas, pero esta prohibición es solo para los judíos, no para el resto. Los judíos tienen una larga tradición de obras críticas sobre occidente y el cristianismo, una gran parte de la cultura occidental proviene de autores, artistas, científicos y eruditos judíos. ¿Dónde esta lo “ofensivo”, lo “prejuicioso” si los no judíos se refieren a los judíos o los usan en sus obras literarias, históricas o artísticas, incluso si son criticas? ¿Acaso no son parte de nuestra cultura e interactúan con nosotros? ¿Acaso artistas como Chagal, Liebermann o Warhet no realizaron obras críticas de nuestra cultura e incluso religión?
Pero el caso de la obra de Eugenio Merino “Starway to Heaven” ni siquiera hay critica, ni existe ofensa, ni prejuicio. Solo cumplió su papel de catalizador de los delirios más oscuros del sionismo, sacando a superficie la vocación de intolerancia del sionismo. Y eso no lo demuestro yo, lo hicieron los diplomáticos israelíes en Madrid.
5 comentarios:
El sionista simpre se persigue, se victimiza y miente...!!!!
Creo que leyendo la intención de Eugenio Merino con su escultura "Starway to Heaven" quizás se entienda un poco la intención.
Es verdad que existe una paranoia dentro del pueblo judío sobre los antizionistas... personalmente, en parte culpables son ellos que pelean por la no asimilación.
En fin, si bien no soy zionista me impacta la obra porque creo que nadie debe pararse sobre otro... especialmente con lo que concierne a Dios.
Yo no soy creyente pero soy respetuosa. El camino del otro o de la otra no se puede juzgar... la fe es una opción.
Interesante eso sí el punto de que el musulman se tiende cerca del suelo, el cura se arodilla y el rabi se para... pero tiene que ver más con los fundamentos religiosos y no un acto de poder.
La "lógica" de cada uno, la forma de llegar a Dios (la piedad y pecado, la reverencia, etc.) es interesante como fenómeno de la religión comparada.
En fin, me parese provocativa la escultura y personalmente me crea una molestia... aunque fueze el hasídico el que está en la parte inferior.
Que el zionista siempre se persigue, sí supongo. El antisemitismo es una realidad... ahora irse al chancho y ser paranoico es otro tema. Lo de la victimización también lo entiendo pero cómo decirles a las antiguas generaciones que sufrieron numerosos éxodos que no lo sean. Incluso la Cábala, que no es exlusivamente de la religión judía (muchos cristianos y musulmanes ayudaron a su creación y la estudiaron) se unieron a la lógica del constante movimiento por eso mismo. Lo de la mentira, bueno, allí creo que hay que matizar.
Que los diplomáticos Israelíes hablen por todos los judíos e incluso israelíes es perturbador... siendo yo judía.
Insisto y no es primera vez que lo digo, ser judí@ y ser zionista no es lo mismo.
Todo esto lo digo con un poco de miedo a que se malinterprete pero me arriesgo porque creo en el diálogo, en la causa palestina, en la reflexión y la expresión.
Estamos en contacto.
Saludos
pd: me sigue perturbando el título antiozionismo y el logo de una estrella magen david (imagen judía y no zionista necesariamente) con una suástica (que doloroso verlo aunque entiendo q dicen que en el corazón del judaísmo también hay genocidio)...
Bueno, ya saben mi opinión sobre las "anti" cosas.
Ojalá se de un diálogo interesante y que se fomente la participación de más judí@s en este blog.
“Starway to Heaven”, es una representación objetiva de la ecuméne-abrahamica.El cristianismo se inició como un movimiento laico. La Epístola apócrifa de los Hechos de Felipe, expone al cristianismo como continuación de la educación en los valores de la paideía griega, que persigue alcanzar la trascendencia humana y la sociedad perfecta, promovida por los sabios alejandrinos avocados a comprobar la veracidad de la teoría Aristotélica formulada al abordar el problema del alma truncada sosteniendo que el hombre puede trascender a sus propias limitaciones si practica metódicamente las virtudes opuestas a sus defectos hasta alcanzar la supra humanidad. Cuando se enteraron de la trascendencia humana patente en Cristo cuando unos griegos lo entrevistaron (Jn XII, 20 al 24). Posteriormente enviaron al medico Lucas a dar testimonio escrito de los portentos, vida, ejemplo y enseñanza de Cristo, a fin de fe-datar en la persona de Cristo, que es cierta la teoría de la trascendencia humana y las potencialidades espirituales inherentes a ese estadío. A partir de entonces, los pueblos helénicos tomando a Cristo como ejemplo de lo que es la trascendencia humana, lo siguieron no como Dios, sino como hombre, a fin de alcanzar la trascendencia humana y la sociedad perfecta; por ello lucharon por helenizar el cristianismo estructurando la fe conforme a la razón. Lo cual propició el choque entre culturas ante la oposición radical e intransigente de los príncipes de la sinagoga al uso de la razón en cuestiones sagradas tendente a evitar que se helenizara el cristianismo para mantenerlo sujeto a la Sinagoga. Desde entonces el talón de Aquiles de la doctrina de la Iglesia ha sido el profetismo judío y el fideísmo bíblico. Contradiciendo la enseñanza sobre el uso de la razón en cuestiones de fe que Cristo había revelado metafóricamente al ciego de nacimiento (Jn IX, 39), para hacer un juicio justo de nuestras creencias a fin de encontrar la verdad que nos liberara de las falsas certezas de la fe que nos mantienen ciegos__ Provocando en los pueblos cristianos la estulticia generalizada y la entronización del oscurantismo, al olvidar las raíces helenistas de nuestra cultura; lo cual ha convertido las Iglesias en sinagogas, los sacerdotes en rabinos, los cristianos en siervos del gobierno mundial judío, y el judeo cristianismo en religión chatarra. Así el movimiento cristiano dejó de ser laico y dejó de perseguir los fines últimos de la educación en la paideía; y por ello, no hemos alcanzado la sociedad perfecta ni la trascendencia humana. http://www.scribd.com/doc/17148152/CRÍTICA-A-LA-UTOPÍA-CRISTIANA-EN-DEFENSA-DEL-ESTADO-LA-IGLESIA-Y-LA-SOCIEDAD
http://www.youtube.com/watch?v=_qxzZY4JycY
Buenos comentarios Kariz y Rodolfo
Exelentes Comentarios.
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